Este grupo escultórico representa al río Nilo como un anciano recostado acompañado por una esfinge en relación a su recorrido egipcio y dieciséis niños jugando a su alrededor. He leido en algunas webs que asumen sin dudar que estos niños son los afluentes del Nilo, teoría que pongo en duda básicamente por dos razones: una, sabemos hoy en día que sus afluentes principales son el Nilo azul y el blanco y dos, para la época en que fue creada la obra en el periodo helenístico dudo mucho que conocieran las fuentes del río más allá de Nubia. Así es que me inclino por la otra teoria que he leido que representan dieciséis codos de subida de nivel cuando tenían lugar las antiguas inundaciones antes de las presas actuales. Sumamos el detalle que porta en su mano el cuerno de la abundancia aunque otros dicen que es un junco, además podemos ver también a los niños jugando con un cocodrilo.
Para situar esta escultura históricamente debemos hacer un poco de resumen artístico. La escultura griega a partir del siglo IVa.C se va humanizando, abandona las formas rigidas y estáticas de la etapa clásica. Comienzan a mostrarse figuras escultóricas más realistas, a veces dramáticas y de una enorme vitalidad.
Los mayores exponentes de esta época son Praxiteles con su inclinación hacia formas juveniles y amables como Dioniso niño con Hermes; Skopas con una intención más trágica y melancólica, autor de los frisos del mausoleo de Halicarnaso, Lisipo quizás es el más conocido por ser el escultor de cabecera de Alejandro Magno, era discípulo de Policleto y entre varios retratos de Alejandro también es de destacar por ejemplo el de Heracles Farnesio.
Gracias a las conquistas de Alejandro Magno comienza lo que se denomina el periodo helenístico, donde la visión del arte griego fue adaptándose a los nuevos estilos más orientales aportando a la escultura un ligero toque exótico. No solo se representan cuerpos adultos atléticos sino que aparecen ya niños y ancianos, Se abandona el idealismo clásico buscando un mayor realismo de la figura y una búsqueda de movimiento. A partir del siglo II a.C toman importancia diferentes estilos según las escuelas como verdaderos talleres de producción en contraposición al individualismo que venía dandose hasta entonces. A destacar tenemos la Escuela de Rodas cuyo mejor exponente es la del dramático Laoconte y sus hijos, sacerdote troyano devorado por una serpiente obra de Agesandro y sus hijos Polidoro y Atanadoro. La famosa Escuela de Pérgamo, ciudad del Asia Menor, nos deja magníficas obras como la del Galo Moribundo y los relieves del altar de Zeus y Atena en Pérgamo obra promovida por Eumenes donde se representa una Gigantomaquia actualmente en Berlín. La Escuela de Tralles tiene como ejemplo el Toro Farnesio en el arqueológico de Nápoles y por último la Escuela de Alejandría con obras como la apoteosis de Homero de Arquelaos y la Alegoría del Nilo, obra que os presento, donde se le da gran importancia a la cotidianidad y a las alegorías.
Como detalle he visto que en un tetradracma acuñado en la época del emperador Adriano que se data del 132 o 133 d.C se representa de nuevo esta alegoría en el anverso, nada de extrañar conociendo la pasión de este emperador romano por la cultura griega, tanto que le llevaría a tener a su propia "escultura griega" como acompañante en forma de joven llamado Antínoo, pero esa será la historia de otro artículo.
Para los interesados, podéis visitar esta obra en los Museos Vaticanos junto con muchas otras que he nombrado.
Tu reflexión me parece bastante buena, haber si leo mas sobre la escultura que puede sacar mas conclusiones, como muchos mi favorita es la del galo.
ResponderEliminarLo de Antinoo, para otro articulo y un libro.
Felicidades por este gran articulo y gracias por el link a promos directo este post.
Una entrada impresionante.
ResponderEliminarLa verdad que el periódo helenístico es el más bonito para mi gusto. La orientalización enriquece el arte griego y lo hace más exótico.
Un saludo!
Muchas gracias Pablo, bienvenido!!
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