Parsa llamada Persépolis por los griegos fue la gran capital ceremonial de la dinastía de los Aqueménidas en el Imperio Persa. El cual en los tiempos de máximo esplendor abarcaba anatolia, egipto y por el oriente toda mesopotamia hasta la India.
La citada dinastía fundada por Ciro el Grande el conquistador de la ciudad de Babilonia
perduró durante unos 200 años hasta Darío III que finalmente sería derrotado por Alejandro Magno.
Alejandro contra Darío III en la batalla de Isos
Aunque puede que hubiera antecedentes de población en la ciudad digamos que la fundación oficial corrió a cargo de Darío I
Pretendía con este gesto dar notoriedad a su reinado y legitimizarlo ya que no había llegado al poder precisamente por razones hereditarias sino por intrigas palaciegas. Ya había otras ciudades capitales en el Imperio Persa como eran Susa, Pasagarda , la misma Babilonia y Ecbatana en el norte, sin embargo ésta debería ser más espectacular para demostrar todo el poder de los persas al mundo, de una manera política y religiosa.
Así fue como comenzaron los trabajos del gran complejo palaciego con la construccion inicial de una gran terraza elevada sobre la que se colocarían un palacio, el edificio del tesoro y la fase inicial de la gran sala Apadana que haría las veces de sala de audiencias, la famosa estancia de las 72 columnas de 25 metros de altura con capiteles de animales, policromada en toda su extensión, además de ornamentos, dorados y púrpuras para impresionar, dispuesta para albergar delegaciones y público de miles de personas.
Jerjes su hijo se encargaría de completarla, asi como de sumarle otro palacio mayor, la famosa puerta de las Naciones y una inmensa sala del trono de 100 columnas. Sus sucesores se encargarían de aumentar el número de palacios, corredores y demás estancias en la ciudad .
Bajo el mandato de Darío III derrotado, la ciudad fue incendiada por Alejandro Magno en un acto de venganza contra los persas por los acontecimientos sufridos siglos anteriores en Grecia. Haciendola desaparecer hacía desaparecer un símbolo para los Persas y demostraba que ahora quien mandaba era Alejandro, dicen sin embargo que este arranque fue producto del alcohol y que después se arrepentiría..
Sea como fuere su final, el caso es que durante su tiempo de vida ésta debió ser espectacular tanto por el bullicio de las obras y del ejercito de trabajadores permanente que habría allí como por todas las ceremonias desfiles que se desarrollaron en el marco de la gran capital.
Sólo hay que observar los relieves que se conservan de las grandes embajadas, se pueden reconocer perfectamente dignatarios venidos de todos los rincones del imperio tanto por sus ropajes como por los regalos que le traian al Rey de reyes.
Todos ellos eran precedidos por la guardia de Los Inmortales llamados así porque cuando uno caía otros le reemplazaba sin mermar su número.
El rey se presenta normalmente sentado en su trono que se apoya en los diferentes pueblos que integran el imperio.Podemos ver desde babilonios y asirios, gente de la india, jonios de la costa, medos, bactrianos de la zona donde Alejandro encontraria a su querida Roxana.
Las ruinas de Persépolis en el actual Irán nos demuestran que todo en la ciudad estaba hecho a una escala para impresionar, las columnas, los palacios, las esfinges legado de babilonios y asirios, los toros y leones (símbolo de los persas). Las excavaciones apenas han reconstruido el lugar y aún nos da una muestra de la grandeza que tuvo hace 2500 años.
Las Tumbas de los Aqueménidas
Por si queréis saber más aquí tenéis completo el documental : Persia, construyendo un Imperio
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